domingo, 11 de septiembre de 2011

HACE 10 AÑOS EN UN MUNDO NO TAN DISTINTO...

HACE 10 AÑOS EN UN MUNDO NO TAN DISTINTO... yo ni era padre, ni tenía la implicación político-social que ahora me ocupa buena parte de mi tiempo libre; pero con los atentados del 11 S creo que empecé a reaccionar y a comprometerme.

Por aquel entonces escuchaba Intereconomía, me gustaba oír los programas sobre los mercados bursátiles, pues me había ido muy bien en todas las privatizaciones de lo 90, que por aquellos años se las llamaba OPVs o salidas a bolsa de empresas públicas y no se "escuchaba" a nadie oponerse a ellas (ahora sé por ejemplo que compañeros de ATTAC llevaban tiempo denunciándolo e incluso haciendo campaña ya entonces por el ITF y contra los Paraísos Fiscales).

Estábamos todavía con la resaca de la explosión de la burbuja de "las punto com" y muchos españoles estaban ya "enTerrados" tras haber comprado acciones de Terra carísimas que con los atentados en EEUU se hundieron todavía más junto con todos los índices bursátiles. Tengo que decir en cualquier caso, que por aquel entonces los noticiarios de Intereconomía eran razonablemente plurales e incluso críticos con el gobierno de Aznar; pero sobre todo tenían una cualidad que no sé si ahora habrán perdido pues es obvio que ahora esta cadena es junto con Libertad Digital y Telemadrid lo más detestable del panorama informativo; no ponían las absurdas noticias de sucesos que llenaban entonces como ahora los noticiarios.  

En especial recuerdo que el Sr. Caba (ver su curiosa Web y el curso sobre especulación que ofrece para octubre, cuyo título ya es bastante curioso) aseguraba que el presidente de la FED, el Sr. Alan Grispan al que llamaba "burbujita Grispan" se equivocaba en su política monetaria pues solo sabía crear burbujas y que después del colapso de la burbuja de las empresas tecnológicas se iba a crear una burbuja seguramente inmobiliaria que también terminaría rompiéndose con consecuencias aún peores que la de las ".com". Acababa de pasar el temido "efecto 2000" que mantuvo entretenidos a medio mundo con la posibilidad de que los ordenadores fallasen con el cambio de siglo por la tontería de que se diseñaron con la fecha compuesta por dos dígitos: ¡la dinero que se gastaron las empresas para conjurar aquel absurdo peligro!

Realmente no era un mundo tan distinto al actual, pero vaya diez años que hemos vivido desde entonces; personalmente a parte de la gran experiencia de mi vida que ha sido sin duda, compartir con mi mujer la aventura de criar a un niño y una niña excepcionales; en lo político-social empecé con las manifestaciones contra la guerra de Irak y ahora estoy metido en más historias de las que puedo abarcar.

Una de las cosas por las que más me gusta escribir es por encontrarme con mi yo pasado cuando leo lo escrito hace años; hoy tocaba como no, volver a leer lo que aquel 11 de septiembre de 2001 empecé a escribir y que al cabo de unos días compartí con unos cuantos familiares y amigos, aunque sin revelar mi identidad pues por aquel entonces no me había entrado la manía de compartir mis escritos, ni tampoco estaban de moda los blogs, ni existía Facebook... bueno quizá sí que el mundo era distinto.

Saludos
Rober Gonpane

UNA RESPUESTA EFICAZ (Al ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001)

En estos días de tristeza y reflexión, ante lo que bien podría ser el principio del fin de nuestra civilización, debemos serenar nuestras mentes y silenciar con la razón los despropósitos que brinda la rabia y el odio por lo ocurrido.

En todas partes oímos a diario opiniones y discusiones sobre la respuesta que EEUU dará al ataque terrorista del 11 de septiembre. Si bien desde el lado “oficial” no he oído más que palabras razonables y sosegadas, sé que también están ahí, en los despachos de los grandes mandatarios del mundo, las opciones que contentarían a los muchos que mantienen como viable sin ver más allá de sus narices, que una respuesta militar contundente y despiadada es inevitable, lógica y justificada.

Sin duda hay que dar una respuesta contundente y si es preciso militar al ataque. No tiene que ser una respuesta puntual sino continuada. Si tiene que durar 20 años, no importa, pero tiene que ser una respuesta definitiva. No podemos tolerar que en este planeta convivan entre la gente pacífica asesinos despiadados sin escrúpulos (utilizo la expresión gente pacífica por no decir entre nosotros, o gente de buena voluntad, o gente temerosa de Dios porque aquí o cabemos todos o no cabe ni ...).

Realmente tiene que ser una lucha inmensa y diferente, del bien de toda condición raza o credo, contra el mal en cualquiera de sus formas. No es el enemigo un solo grupo de extremistas islámicos, hay otros muchos grupos terrorista, organizaciones mafiosas, traficantes de drogas, de armas, de trabajadores esclavizados, de esclavos sexuales...

Todos tienen algo en común que los convierten en enemigos de la humanidad. Ninguno respeta la vida ni la dignidad humana del prójimo y usan a las personas para obtener sus propósitos. No solo no reconocen sino que se jactan de violar por sistema las Declaraciones Universales de los Derechos Humanos que son los más sublimes pensamientos escritos por la especie humana y que son el mejor reflejo de nuestra inteligencia y conciencia de nuestra propia existencia en el mundo.

Cierto es lo que muchos argumentan de que estas Declaraciones universales son solo papel mojado y la propia ONU y las naciones que la forman las violan con decisiones parciales, e injustas casi siempre en contra de los más débiles.  Nadie dice que nuestro mundo sea perfecto, pero a esos catastrofistas insolentes que se atreven a poner en tela de juicio el trabajo y el sufrimiento de generaciones y generaciones que han luchado por conseguir que estos principios se tuvieran en cuenta, les diría simplemente que estudiaran un poco de historia.

EEUU es sin duda la cabeza del Imperio pese a quien pese. Nueva York es a este Imperio lo que Roma era hace 2000 años. Otros muchos Imperios han existido con sus correspondientes capitales y formas de gobierno y conoce alguien alguno que tuviera entre sus principios fundamentales algo parecido a la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Creo que fue en 1776 cuando comenzó la guerra de Independencia de EEUU cuando se hizo una declaración oficial de estos principios. En Francia, en la revolución de 1789 se promulgaron también estas ideas aunque desde entonces han sido pisoteadas una y mil veces a lo largo de todo el planeta y sin duda también por las citadas dos naciones.

En 1945 tras la Segunda Guerra Mundial se fundó la Organización de la  Naciones Unidas para, según consta en su carta fundacional: “mantener la paz y seguridad internacionales”, “desarrollar relaciones de amistad entre las naciones”, “alcanzar una cooperación internacional fundada sobre las relaciones de amistad entre las naciones”, “alcanzar una cooperación internacional en la solución de problemas económicos, sociales, culturales o humanitarios” y “fomentar el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales”.

Aunque para muchos es un solo un instrumento del Imperio, es sin duda el único foro común a todas las naciones del planeta y además es un foro en el que guste o no, se repare más o menos en ello, la citada Declaración de los derechos humanos es una referencia obligada. ¿Se imaginan un mundo en el que existiera este lugar de debate de las naciones? ¿Se imaginan el contraataque imperial si EEUU no tuviera ataduras morales y principios supuestamente inviolables?

Me hace mucha gracia oír a los que  argumentan en contra de los norteamericanos por sistema. A esta pregunta me contestarían que EEUU ya hace bastante daño y no tiene ningún problema de conciencia. Como cabeza del Imperio Capitalista es responsable de las mayores atrocidades cometidas en el planeta, responsable del hambre y la miseria del mundo, de mil y una guerras menores, etc...  Como si todo esto no fuera a existir sin EEUU, como si todas esas desgracias del mundo no hubieran estado siempre. Es muy fácil echar las culpas a alguien o algo, simplifica los problemas muchísimo.

Nunca a lo largo de toda la historia ha habido una potencia militar y económica como la que es ahora en septiembre de 2001 los EEUU de Norteamérica. Su supremacía militar tecnológica y económica es tan aplastantemente superior a la del resto de las naciones que no quiero ni imaginar lo que sería del mundo, si tuvieran los fundamentos morales y principios que tenían: la Alemania de Hitler, la URSS de Stalin, el Japón de los años 30, la Inglaterra de la Reina Victoria, la Francia de Napoleón, la España de Felipe II, el Imperio Otomano, el Imperio Islámico, el Imperio Mongol, la Roma de Julio Cesar, la Grecia de Alejandro Magno, el Egipto de los Faraones...

Quizá no tengamos que imaginarlo ya que la historia se está reconduciendo por unos cauces en los que a lo peor, los que abogan por una solución rápida a problemas como el terrorismo internacional, en estos momentos de desastre encuentren el apoyo que necesitan para emprender un camino que nadie puede saber a donde nos llevará.

La solución del problema planteado es muy compleja y lo más probable es que se tomen solo soluciones parciales, parches que solo duran en el mejor de los casos una o dos generaciones. Pero en cualquier caso debemos exigir a nuestros gobernantes que no sea una solución que nos conduzca a un proceso irreversible de violencia.

No es momento de apelar a la buena voluntad o al respeto a los derechos humanos. Los que quieren liberar al Imperio de las ataduras morales a la hora de dar una respuesta tienen ahora sobrados argumentos para apagar la llama de la razón y la cordura y aparecer como los únicos que pueden dar una respuesta adecuada. Lo que debemos pedir y exigir es que la respuesta sea EFICAZ en términos históricos, es decir EFICAZ Y DEFINITIVA.

Una solución de este tipo solo puede ser viable si tienen el mayor consenso universal posible y si abarca todas las áreas todos los problemas en sus más profundas raíces.  Todos los enemigos de la humanidad que hemos citado antes, crecen y se multiplican en unos contextos bien definidos de incultura, pobreza, hambre, enfermedades, miseria...

En un mundo “globalizado” no se puede consentir que existan unas diferencias económicas tan insultantes. No es posible un mundo como el que queremos mientras que occidente no tome como una de sus prioridades más importantes la reconstrucción o construcción en muchos casos casi desde la nada, de sociedades desarrolladas cultural, política, social y económicamente en todos los países del tercer mundo. También deberá hacerse lo imposible por invertir el curso hacia el desastre de países como Rusia sin los que no es posible la estabilidad mundial. Por supuesto EEUU y todos los países desarrollados del primer mundo deberían tratar de  acabar con las miserias internas de ese cuarto mundo que mal vive en los lugares más ocultos de sus ciudades. Todos los países desarrollados deberían tener un Ministerio para el Desarrollo Externo con un importante presupuesto para conducir a las empresas hacia el desarrollo de infraestructuras modernas en todo el mundo que hicieran posible una globalización justa que evitara de paso la invasión pacifica e imparable de los sin papeles, que a nado o en “pateras” en el Río Grande, en el Estrecho de Gibraltar o por donde sea, seguirán huyendo del hambre atraídos por el lujoso escaparate occidental.

Sin duda una guerra del bien contra el mal en la tierra debería contar con todos los elementos anteriores además de con el posiblemente imprescindible componente militar. Así si que sería una respuesta EFICAZ y además una respuesta inesperada para los terroristas.

Lo que desean lo que prepararon el ataque a N.Y. es que la respuesta sea militar, contundente y despiadada, porque así ante los suyos serán ya definitivamente lo únicos héroes capaces de enfrentarse al imperio. No se si que tipo de contraataque esperan o desean, pero que no crea nadie que EEUU va a permitir que se le rían en las narices. Hay un peligro cierto de que, en estos momentos de rabia y ofuscación, si hay un nuevo ataque terrorista o si se una respuesta militar ineficaz es contestada con amenazas e insultos, la respuesta siguiente sea un fulminante ataque con ARMAS NUCLEARES.

Quizá sea eso precisamente lo que buscan los terroristas, o quizá confíen demasiado en que no se atreverán a dar ese paso. Pero lamentablemente no es una locura pensar en ello, es una posibilidad real  que posiblemente no tendría, al menos en principio, una oposición contundente en la opinión pública. En cualquier caso aunque surgiera una clara conciencia social contra el ataque nuclear después de haberse realizado ya sería demasiado tarde. Todos esperan bombardeos masivos como los de que se hicieron sobre Irak o Yugoslavia y parecería más de lo mismo. Pero quizá se decidan por algo mucho más barato y simple. Cuatro o cinco misiles de precisión con cabeza de guerra nuclear sobre las bases militares Afganas y nadie dudaría nunca más de que con los EEUU no se juega. 

En cuanto se utilicen armas de destrucción masiva se entrará en una nueva dimensión del problema y será irreversible. Solo cabrá la huida hacia delante y sin saber a donde. Eso si llegado este caso los que se pusieran del lado de los terroristas, tendrían en contra a la mayor y más poderosa fuerza militar jamás conocida y seguramente con un gran consenso a nivel planetario. No me gustaría vivir en un país que se pusiera al otro lado, pero tampoco quiero vivir con los vencedores de una tan desigual guerra, que como todas las guerras afectará principalmente a muchos inocentes que no han tenido más remedio que seguir viviendo donde nacieron. Hay quien piensa que es posible una victoria militar incluso con armas de destrucción masiva. Lo pensaban y tenían planes precisos incluso en tiempos de la guerra fría y ahora es mucho más creíble de lo que lo era entonces, aunque eso si es igualmente imposible.

Me atormenta tener estos pensamientos y no poder hacer nada. Si tenías una visión más optimista siento habértela fastidiado. Estoy seguro de que miles o millones de personas como yo estarán pensando en silencio cosas similares. ¿Como evitar que el Imperio cometa el error histórico al que le quieren conducir? A todos, simpatizante o contrarios nos interesa que si la historia realiza un giro lo haga para bien no hacia el desastre. Nadie que lo piense fríamente y con visión de futuro puede considerar admisible el uso de armas nucleares, ni siquiera los que en estos momento de ira pueden decir que es una buena solución. Las consecuencias las pagaríamos todos y le dejaríamos un triste legado a nuestros hijos.

Pero ¿qué podemos hacer? No parece muy lógico ni procedente manifestarse ahora contra del uso de armas de destrucción masiva porque a todos nos parece que hay un consenso generalizado al respecto, y nadie ha dicho nada que haga pensar lo contrario. Sin embargo estaría más tranquilo si en lugar de darse por sentado, hubiera un debate que dejara bien claro lo inadmisible que sería el uso de este tipo de armas. Aunque bien pensado también es posible que ese debate no dejara las cosas tan claras...

Un ciudadano /a del planeta tierra.