domingo, 16 de abril de 2017

Despedida en el funeral y Bienvenida en el bautizo

Aprovecho la curiosa unión entre bebés y ancianos, a propósito de los pañales, que exponía en mi anterior entrada (Libertad y Dependencia...), para copiar un par de textos que no quería que se me perdieran.

El primero se lo dedicó mi ahijada y sobrina a su ahijado y sobrino en día de su bautizo, y fue tan genial como el segundo que que había dedicado meses antes a su abuela el día de su funeral. Será orgullo de padrino y tío, pero sin duda estas palabras son el mejor regalo para el bautizado y ojalá se hagan realidad y el destinatario las aprecie como corresponde.

Nos enteramos del embarazo de mi sobrina, hermana de la autora de ambas dedicatorias, el mismo día de la muerte de mi madre, por eso me parece que unir ambos textos en esta entrada es una gran idea.

Gracias Laura por tus bellas palabras, que nunca es tarde para agredecer lo que se hace con amor.

Salud, Amor y Suerte.
@robergonpane

Bienvenida en el bautizo.

Quién pudiera volver a la niñez y volver a repetir su vida sabiendo todo lo que uno ya sabe.
Hoy, en el día de tu bautizo, y con la convicción de que no entenderás nada hasta dentro de unos años, quiero contarte la vida que te está ahí esperando para que la disfrutes.
Llegará el día en que caminarás como un hombre seguro de ti mismo, Luchando por lo que quieres y, sobretodo, levantándote siempre después de caer.
Viajarás a mil lugares para entender las diferentes culturas, la historia y lo grandiosa que es la naturaleza que nos rodea! Aprenderás así el respeto y la tolerancia por todos.
No permitirás que te digan que no vales, que estás loco o que no puedes. Porque habrás de poder.
Serás cariñoso y amable, pues lo más importante de esta vida son las personas que te acompañan cada día y sabrás cuidarlas.
Te esforzarás por labrar tu futuro, pues nadie te regalará nada. Pero lo harás con desempeño, ilusión y valentía, mas deberás ser muy valiente, Lucas!
Aprenderás mil cosas porque cuanto más aprendas mejores soluciones encontrarás a los problemas que puedas tener.
Cuidarás de tus padres, tu familia, tus amores y tus amigos. Pues son los compañeros de vida que jamás te fallarán pase lo que pase.
Valorarás una sonrisa, un abrazo o un gracias. Porque aprenderás que la vida va muy deprisa, y esos detalles te harán mejor.
Y si alguna vez pasa algo malo en tu vida, porque la vida a veces parece tornarse gris, encontrarás la forma de superarlo y colorearla de nuevo.
Porque nunca estarás solo, porque habrás cuidado tanto a la gente que te rodea que te acompañarán por tu aventura.
Tienes un lienzo en blanco que es la vida, píntala de la manera que más feliz te haga! Porque cada día, cada cosa que vivas desde pequeño... te convertirá en el hombre que serás el día de mañana. Quizá ese hombre que un día lea esta carta, y se sienta reflejado en ella.

Despedida en el funeral.

Se nos ha ido, pero ella quería irse y por eso, hoy estoy feliz. 91 años dan para mucho, para exprimir la vida teniendo 5 hijos, 13 nietos, un bisnieto y otro de camino. Nuestra abuela o "pabues" (como Alejandro la llamó desde pequeño) fue una auténtica luchadora y fue capaz de vivir todo tipo de adversidades y alegrías de estos dos siglos.
Fue una niña de la guerra, después una mujer entregada a su familia, luego una viuda capaz de vivir e ir al cine sola y por último una abuela, una abuela moderna con su móvil y su ebook. Porque 91 años dan para tantas cosas que pasó por esta vida pisando fuerte.
Porque es mejor recordarla alegre, cantando, bailando y comiendo dulces y helados. Nos ha regalado miles de recuerdos y de consejos que no nos abandonarán nunca. Afortunadamente venía a casa cada 15 días y tuvimos la suerte de disfrutar de ella y aprender tantas y tantas cosas como sus maravillosas croquetas, su experiencia de la vida o su saber estar.
Porque casi sin poder andar estas navidades intentó bailar con ayuda de Roberto en nochevieja la canción más mítica para Angelines y Concha: "La Mayonesa". Porque era una mujer coqueta, siempre con sus labios pintados y sus uñas largas perfectas. Porque nuestra abuela lo ha superado todo y quizás, quizás cosas demasiado duras de soportar en solo una vida. Pero ella, lo hizo. E incluso se reía de ella misma cuando empezó a perder la memoria y eso es digno de admirar.
Y aunque nos dé pena porque jamás quieres que una persona tan extraordinaria, capaz de superarlo todo, se vaya de nuestro lado, lo cierto es que ella estaba deseando descansar de una vez, como siempre decía. Descansar, olvidarse de sus dolores de piernas, de sus infinitas pastillas y volver a ver al abuelo, que más de una vez repitió que cómo se le ocurrió dejarla tan pronto.
Ahora nos queda su recuerdo dentro de cada uno de nosotros, su historia para contarles a aquellos que no pudieron conocer a la gran mujer que era y sus cosas, que sin duda guardaremos junto a nosotros para sentirnos más cerca de ella.
Estas navidades le dije que pidiera un deseo. No sé qué deseo pidió nuestra abuela, pero lo cierto es que quizás, y ojalá sea así, haya conseguido reencontrarse con su Ricardo y su Lola, como tanto deseaba.