Durante los últimos cuatro años me he cansado de repetir que en lugar de renegar de todos los partidos y sindicatos, sería mejor que se formaran otros o que se transformaran los que había conquistándose desde dentro por millones de indignados. Obviamente nadie entendía que afiliarse a IU o al PSOE, a UGT o a CCOO pudiera ser una solución. Sin duda las rígidas estructuras de estas organizaciones no animan a unirse y a trabajar sin cobrar por ellas. Además es mucho más sencillo sumarse a las críticas y a la dilapidación de las mismas, porque no hay más que dejarse llevar por indignación que los escándalos de corrupción levantan día sí día no.
Cuatro años después el supuestamente caduco sistema reaccionó, sin dejar de seguir al pie de la letra su hoja de ruta, y a la esperada Revolución, se le cayó la "R" inicial y ya veremos si esto evoluciona en la dirección deseada o en la contraria. En 2011 se vio como efectivamente a pesar del 15M, lo único que se consiguió es el hundimiento del PSOE y la correspondiente mayoría absoluta del PP que llevamos casi cuatro años sufriendo.
Muchos indignad@s con los que me encontré en estos años, demasiados diría yo, se creían muy de izquierdas cuando en realidad eran liberales indignados con los políticos, los sindicatos, con las instituciones democráticas, con los funcionarios y con todo lo público. He criticado numerosas veces en este blog y con todo aquel que he podido, que detrás de todas esas campañas antisistema supuestamente de izquierdas, había un oscuro y bien financiado mensaje Neoliberal cuyo fin era desprestigiar todo lo público, para facilitar la privatización y reducir así el Estado a la mínima expresión; el gran sueño del liberalismo económico para el que no hay peor enemigo que el burocrático y costoso aparto estatal, que necesita recaudar cada día más y más impuestos.
Cuántas veces he tenido que decir en estos años a much@s amig@s y conocid@s que se pensaran si realmente eran indignados de Izquierdas o Liberales y finalmente, he obtenido la respuesta que temía con el fulgurante ascenso de Ciudadanos, los indignados Neoliberales encabezados por Albert Rivera, sin duda el partido revelación de 2015 y "el recambio" que el Poder Económico acepta como complemento, e incluso sustituto del desprestigiado Partido Popular, si los escándalos de corrupción se vuelven insoportables.
Y encima todavía hay quien dice que debemos estar contentos de que no asciendan partidos de extrema derecha como en otros países, o que sean Neoliberales "sin complejos" como VOX los que asciendan para equilibrar el peso de Podemos. Sin duda con en este demagógico pero excelente vídeo, VOX se ganará la simpatía de much@s "izquierdistas de toda la vida".
Y encima todavía hay quien dice que debemos estar contentos de que no asciendan partidos de extrema derecha como en otros países, o que sean Neoliberales "sin complejos" como VOX los que asciendan para equilibrar el peso de Podemos. Sin duda con en este demagógico pero excelente vídeo, VOX se ganará la simpatía de much@s "izquierdistas de toda la vida".
Sin duda Podemos fue el que canalizó buena parte del movimiento del 15M, que hace cuatro años yo apoyaba como Socialista entusiasmado con la lucidez del nonagenario Stéphane Hessel que nos animaba a indignarnos y que luego, curiosidades de la política, fue olvidado por el 15M tras recomendar que se apoyara al Gobierno de Zapatero y a los Socialistas franceses.
Los que estábamos indignados pero creíamos en el sistema político, sabíamos que no bastaba solo con protestar, había que "mojarse" y lo entrar en el juego político y eso lo que hizo la formación de Pablo Iglesias. Ni Podemos debe sorprenderse de que no le reciban con los brazos abiertos con lo agresivo que fue en un comienzo su ascenso, ni el resto de partidos democráticos pueden lamentar que el descontento popular que renegaba de la política se canalice finalmente en votos a un nuevo partido.
Lamentablemente para Podemos, llegó Ciudadanos en el último momento y amenaza con acaparar casi la mitad de los votos indignados; otro fenómeno curioso del juego de la política, Ciudadanos recoge frutos de un ya lejano 15M con el que nunca se identificó.
Saludos
Los que estábamos indignados pero creíamos en el sistema político, sabíamos que no bastaba solo con protestar, había que "mojarse" y lo entrar en el juego político y eso lo que hizo la formación de Pablo Iglesias. Ni Podemos debe sorprenderse de que no le reciban con los brazos abiertos con lo agresivo que fue en un comienzo su ascenso, ni el resto de partidos democráticos pueden lamentar que el descontento popular que renegaba de la política se canalice finalmente en votos a un nuevo partido.
Lamentablemente para Podemos, llegó Ciudadanos en el último momento y amenaza con acaparar casi la mitad de los votos indignados; otro fenómeno curioso del juego de la política, Ciudadanos recoge frutos de un ya lejano 15M con el que nunca se identificó.
Saludos
@robergonpane
