En la guerra entre el modelo social Neoliberal y el Socialdemócrata (y si se quiere Democristiano pues también ellos construyeron, aunque más por miedo que por convencimiento, el Estado del Bienestar) hay que reconocer que los planes estratégicos Neoliberales bien aplicados durante los últimos 30 años, han derrotado a la Socialdemocracia en todas partes pero principalmente en Europa. Le ofrecieron a la ciudadanía el sueño capitalista, ser propietarios y dueños de su propia suerte; lo cierto es que muchos nos lo creímos disfrutando del consumo a crédito, en un mar de liquidez y fiesta que nos metió en la trampa. Ahora atrapada e insatisfecha por el fin de los festejos, la ciudadanía no comprende bien lo que pasa y en estado de shock no reacciona como debiera, desorientada e ignorante de la verdadera naturaleza del problema.
No solo usan mentiras y engañosas medias verdades impulsadas por su poderoso aparato propagandístico; esas quizá sean sus armas más emblemáticas y las que más ruido hacen; pero el verdadero peligro de la globalización neoliberal radica en sus "ingenieros financieros" que con juegos de magia y casino han puesto las cargas de demolición del Estado del Bienestar tan concienzudamente, que va a ser casi imposible desactivarlas. Y mientras la población y la izquierda política, preocupados por su poder adquisitivo y pensando a cuatro años vista para no perder poder institucional... sí desgraciadamente estratégicamente nos han derrotado y hasta que no lo aceptemos no podremos iniciar la reconquista. Cabe esperar que a medida que las cosas se ponga cada vez más duras para la clase trabajadora, la población reaccionará al fin... pero a lo peor Trosky tenía razón en esto:
"El problema es que el aumento de la explotación no siempre eleva el espíritu combativo del proletariado. Así, en medio de una baja coyuntural, cuando aumenta la desocupación, sobre todo si sobreviene después de una derrota, el incremento de la explotación no provoca la radicalización de las masas sino todo lo contrario, su desmoralización, atomización y desintegración.".
Yo no confío ni deseo una "revolución" solucione todo en unos pocos años; prefiero una "evolución" lenta pero segura que desmonte todo el edificio Neoliberal mediante la educación política de la población. "La verdad os hará libres" es una frase que nunca dejará de ser cierta, pero sin justicia económica y social no es posible una libertad real. De qué sirve nuestra sociedad si no puede ofrecer a los ciudadanos una aceptable calidad de vida garantizando al menos como pilares básicos la sanidad, la educación y la asistencia a mayores y dependientes. El miedo a no poder comprar el pan de cada día estos otros servicios tan necesarios como el pan, es suficiente para encadenar al ser humano y condenarlo a trabajos forzados y cada vez en peores condiciones, salvo para unos pocos aventajados.
No hay peor prisionero que el que se cree libre, ni contradicción más absurda que el capitalismo popular con el que se ha engañado a los trabajadores del mundo, haciéndoles soñar con que podían construir "castillos en el aire". Puede parecer una reflexión derrotista pero no lo es; es simplemente realista y el asumir la realidad por dura que sea, es siempre un buen principio con el que podemos y debemos ilusionarnos... además "no tenemos tiempo de ser pesimistas."
Así pues este fin de semana iré con optimismo al congreso del PSM en el que entre otras cosas, discutiremos las enmiendas de nuestra agrupación a la ponencia marco del 38º congreso del PSOE. Más de cincuenta interesantes aportaciones han hecho los compañer@s de Moratalaz y yo he aportado solo dos es cierto que son las más largas: son: una sobre el ITF y los Paraísos Fiscales (muy previsible) y otra más curiosa, sobre el uso de un lenguaje económico con índices de referencia más justo que indiquen la situación real de las personas, no como el PIB que siempre da unos ingresos per cápita muy alejados de la realidad de la inmensa mayoría de la población. Ya veremos en que quedan si es que llegan a quedar en algo.
Saludos Socialistas
Rober Gonpane
