El pasado 28 de Octubre se cumpleron 30 años de la abrumadora victoria del PSOE en las
elecciones generales de 1982; cuanto han cambiado las cosas también las cosas
en la Política, por aquel entonces bien valorada y respetada cuando ahora es
atacada y desprestigiada continuamente.
El PSOE es un Partido centenario, pero no debería dejar
que esto además de un orgullo fuera un lastre. En 1979 Felipe González en el XXVIII
Congreso, el del centenario, proclamó la famosa frase: “hay que ser socialistas antes que marxistas” con
lo que abandonaba el carácter revolucionario del partido para comprometerse sin ataduras a
la iniciada reforma Política de España. ¿Debería abandonar el PSOE otros preceptos decimonónicos que resultan anacrónicos en la Europa del siglo XXI?
El PSOE se fundó en 1879, cien años
después de la Revolución Francesa de 1789 y cien años antes del final de la
Guerra Fría con la caída del Muro de Berlín en 1989. Fueron 200 años en los que
en Europa finalmente se alcanzaron, con razonable éxito, los sueños más
ambiciosos de la clase trabajadora; se construyeron unos Estados del Bienestar envidiables…
demasiado envidiables en un Mundo tan injusto y aquel pecado de ignorar al
resto del planeta, lleva asociada la penitencia que nos tocará vivir en el
siglo XXI si no cambian mucho las cosas pues Europa se vuelve prescindible e irrelevante como comentaba el pasado verano.
Claro que una cosa es Europa y el Mundo y otra muy
distinta España; el PSOE llegó al Gobierno en 1982 y solo siete años después
comenzó el desmoronamiento de la Socialdemocracia Europea. Veníamos de una
Dictadura de 40 años tras una terrible guerra civil, lamentable "herencia recibida" que a su
vez venía de siglos de oscurantismo y opresión. Así que quizá haya que
relativizar un poco los últimos treinta años de historia del PSOE, que al menos
han servido para mantener alejados del poder político durante 22 años a la
rancia derechona de siempre, hoy concentrada en el Partido Popular, y que el único Poder que no tiene ahora de forma permanente es el político. Desgraciadamente antes de que termináramos de construir nuestro Estado del Bienestar, llegó la crisis y se comenzó su desmantelamiento.
Los cambios producidos en el mundo en estas últimas
décadas no tienen precedente en la historia, y no por los grandes acontecimientos
sucedidos, sino por el cambio que supone el que finalmente la humanidad haya
tomado conciencia de su propia existencia, gracias en buena parte al desarrollo
de las tecnologías de la información y la comunicación.
Pero que el mundo haya cambiado no me hacer resignarme a que mis hij@s tengan que ser
competitivos con los Chinos o los Indios, porque no quiero que tengamos que
vivir en las condiciones que ellos sufren. Son estos países los que tienen que
avanzar y conceder a sus ciudadanos unas condiciones de vida mejores. Los
Europeos (porque no hay duda que tras los GIPSI vendrán el resto de países de Europa que disfrutan de jugosos servicios sociales de deseable privatización) tenemos que evitar que se desmantelen los Estado
del Bienestar con la excusa de ser competitivos en un mundo globalizado; en
Europa esto no es una cuestión de ideologías sino de simple sentido común porque esto no es solo una crisis, es una guerra entre modelos sociales y el europeo lleva todas las de perder.
El Capitalismo siempre se sustentó en
la Propiedad Privada y el Mercado; pero ahora cuenta con un nuevo y poderoso
aliado: la Globalización económica. No podemos ni debemos minusvalorar el reto
y la amenaza que ello supone para todos los trabajador@s del mundo.
La crisis que vivimos es el resultado de un Mercado
Global, con mínimas regulaciones, con dimensiones planetarias y con la mayor
protección a la Propiedad Privada que jamás ha existido, gracias a la facilidad
de los movimientos internacionales de Capitales y a la vergonzosa existencia de
Paraísos Fiscales. Son
necesarios cambios estructurales en todo el sistema financiero mundial y si la Izquierda no liderar políticamente el proceso, el cambio no será favorable para la ciudadanía. Es hora ya de
que la Izquierda, y en particular el PSOE, deje atrás de una vez los complejos (absurda e
injustamente adquiridos desde la caída del muro de Berlín hace ya más de 20
años) y entre de una vez en la era Global.
Los Liberales prepararon bien la revancha y consiguieron diseñar una Globalización Neoliberal que aparentemente era una oportunidad de desarrollo para todo el mundo, pero que gracias a la total Financiarización de la economía, se ha convertido en una trampa que hace casi imposible que se puedan poner en práctica políticas de sociales que mejoren la calidad de vida de la población. Llevan más de 30
años haciendo su revolución con gran éxito y han logrando imponer un verdadero Totalitarismo Financiero Global que terminará por esclavizar al 99% de la humanidad para mayor comodidad y disfrute de un 1% dirigido por no más de 84,500 personas de super alto nivel neto de riqueza "UHNW" (Ultra High Net Worth) con más de 50 millones de dólares "disponibles".
Como se cuenta en este interesante documento de Credit Suisse (lamentablemente en inglés) el número de estos ultra-millonarios crecerá a nivel global un 62,4% en los próximos 5 años y en España pasará de 330 a 660 individuos... toda una oportunidad para la banca de conseguir nuevos clientes deseosos de llevar parte de su patrimonio a uno de los numerosos Paraísos Fiscales que florecerán por todo el planeta gracias a las amnistías fiscales y los acuerdos Rubik que nada tienen que ver con el famoso cubo.
Saludos
Rober Gonpane